jueves, 21 de octubre de 2010

Dos lugares con encanto

Por fin, un bus a todo lujo... tenía asientos que se reclinaban hasta el infinito y hasta masaje!! No fue un viaje muy largo, fueron unas 4 horas, pero disfrutarlo lo disfrutamos. Después de tanto minivan, incomodidad y contorsionismo, nos relajamos y estiramos a nuestras anchas. Mirar, mirar...

Así es como volvimos de nuestro día de “shopping” en Singapur a Malasia, esta vez a Melaka.

Declarado Patrimonio Mundial, este bello lugar invita al paseo y el descubrimiento a través de sus calles con casitas bajas y edificios rojizos de estilo portugués. Melaka, lugar importante para el pasado de Malasia, en la actualidad gracias a su mestizaje cultural que se refleja en diferentes aspectos del día a día (comida, variedad de templos, costumbres, idiomas, arte...) es sin duda un lugar para visitar.


La verdad es que nosotras estuvimos 2 noches, no más. Pero el poco tiempo que tuvimos lo dedicamos a pasear por las calles de Chinatown, conocer originales cafeterías y hablar con gente de Melaka. Eso es lo mejor, poder hablar con oriundos y oriundas que sus intenciones no son venderte nada, tan solo hablar e intercambiar. Es así como conocimos un poco más la realidad de Melaka y la de Malasia; de cómo hay escuelas Chinas, Malayas o Indias y son las familias quienes eligen donde quieren enviar a sus hijos o hijas. De cómo elegir una escuela u otra depende de la religión, cultura e idioma que tiene cada familia. De cómo viven la multiculturalidad. De cómo las familias prefieren que sus hijas se casen con chinos y no con hindús, ya que estos últimos parece ser, se consideran pobres. Sobre estas y otras cosas hablamos en un pequeño establecimiento mientras probábamos dulces típicos de la comida “nonya”, que así se llama a la comida chino-malaya.

Como veis, no fue mucho tiempo pero bien aprovechado. Y de un lugar con encanto, a otro. A Kuala Lumpur; capital de Malasia.

Kuala Lumpur fue el lugar donde...

-Acudimos por primera vez (y esperamos que la última) un hospital asiático (este era Chino, para más señas) por un tema de alergias.

-Visitamos las hermosas Torres Petronas de día y de noche.

-Mientras desayunábamos, conocimos a Milky y Nathan; una pareja de amigos de Filipinas, con los cuales pasamos un día divertidísimo y seguramente nos volvamos a ver en Manila.

-Nos adentramos en un templo Hindú que está ubicado en la oscuridad de una cueva.

-Celebramos, unos días antes de la fecha, el cumple de Laura. Y se encaprichó en ponerse una visera de lo más sencilla....

-Ana, después de 2 meses con maleta o mochila, cogió el vuelo de vuelta a casa. Eso sí, montó en el avión muy bien acompañada por Mike. Un amigo de Taiwán.

Estos fueron nuestros 2 últimos rincones de Malasia.... y aunque nos quedan una infinidad por descubrir, Malasia ha causado una sensación muy muy agradable en maleta o mochila; rico en cultura, en lenguas, en gastronomía, en amabilidad, en belleza...

...a ver qué opinión os merece a vosotras y vosotros.

martes, 12 de octubre de 2010

Un dia en Singapur

No quedaban demasiados dias para que Ana se fuera, y ya que estábamos “cerca” decidimos ir a pasar un dia en Singapur (Singapur es otro país, que se encuentra al sur de la península de Malasia :-P y, por cierto, donde el tráfico de drogas se castiga con pena de muerte).

Así que desde Taman Negara cogimos un autobús local que nos llevaría a un pueblecito donde salía el tren. Y después de 11h en el tren, incluyendo una parada en la frontera, llegamos a Singapur (a la 1h de la mañana del dia siguiente).

La primera impresión fue encontrarnos con una ciudad hiper moderna (quizá una de las más modernas de Asia), llena de rascacielos, gente bien vestida, y coches de lujo. Nos pareció que tenía un aire a Hong Kong.

Lo primero que nos dijo el taxista fue “puedes abrocharte el cinturón, por favor?” bueno, esto lo dijo en inglés. Parecía que ya no estábamos en Asia. “Qué idioma se habla aquí?” -preguntamos nosotras- y él respondió “inglés” (aunque consultando la guía vimos que también se usa el chino, el malayo y el tamil). Después de un paseo por la ciudad (que por cierto estaba practicamente cortada debido al gran premio de F1 que se celebraba ese fin de semana por las calles), y de un montón de explicaciones turísticas que nos dió nuestro taxista, llegamos al Hostel que habíamos reservado en el barrio de Little India (el barrio hindú). El barrio era curioso, como el Lttle India que habíamos visto en Georgetown, con sus tiendas y restaurantes hindús, y su gente.

Así que pasamos la noche en un dormitorio compartido con otros 10 viajeros, muy moderno y limpio, aunque un poco pequeño. Y al día siguiente nos levantamos pronto para hacer algo muy popular en Singapur: shopping (ir de compras). Y es que en Singapur los precios están mucho más baratos que en Europa, especialmente en electrónica e informática, así que hay que aprovechar!

Después de nuestro shopping fuimos a visitar la ciudad: templos chinos, templos hindús, centros hawker (una especie de comedores gigantes donde hay comida rápida de todo tipo a precios muy baratos), museo de arte, Marina Bay, Esplanade, y cómo no... su metro ultramoderno MRT (Mass Rapid Transit).

Como veis, solo fue un dia en Singapur, pero lo aprovechamos bien.

Mas fotos en: http://www.flickr.com/photos/50288028@N07/sets/72157625153534824/