Así es como volvimos de nuestro día de “shopping” en Singapur a Malasia, esta vez a Melaka.
Declarado Patrimonio Mundial, este bello lugar invita al paseo y el descubrimiento a través de sus calles con casitas bajas y edificios rojizos de estilo portugués. Melaka, lugar importante para el pasado de Malasia, en la actualidad gracias a su mestizaje cultural que se refleja en diferentes aspectos del día a día (comida, variedad de templos, costumbres, idiomas, arte...) es sin duda un lugar para visitar.
La verdad es que nosotras estuvimos 2 noches, no más. Pero el poco tiempo que tuvimos lo dedicamos a pasear por las calles de Chinatown, conocer originales cafeterías y hablar con gente de Melaka. Eso es lo mejor, poder hablar con oriundos y oriundas que sus intenciones no son venderte nada, tan solo hablar e intercambiar. Es así como conocimos un poco más la realidad de Melaka y la de Malasia; de cómo hay escuelas Chinas, Malayas o Indias y son las familias quienes eligen donde quieren enviar a sus hijos o hijas. De cómo elegir una escuela u otra depende de la religión, cultura e idioma que tiene cada familia. De cómo viven la multiculturalidad. De cómo las familias prefieren que sus hijas se casen con chinos y no con hindús, ya que estos últimos parece ser, se consideran pobres. Sobre estas y otras cosas hablamos en un pequeño establecimiento mientras probábamos dulces típicos de la comida “nonya”, que así se llama a la comida chino-malaya.
Como veis, no fue mucho tiempo pero bien aprovechado. Y de un lugar con encanto, a otro. A Kuala Lumpur; capital de Malasia.
Kuala Lumpur fue el lugar donde...
-Acudimos por primera vez (y esperamos que la última) un hospital asiático (este era Chino, para más señas) por un tema de alergias.
-Visitamos las hermosas Torres Petronas de día y de noche.
-Mientras desayunábamos, conocimos a Milky y Nathan; una pareja de amigos de Filipinas, con los cuales pasamos un día divertidísimo y seguramente nos volvamos a ver en Manila.
-Nos adentramos en un templo Hindú que está ubicado en la oscuridad de una cueva.
-Celebramos, unos días antes de la fecha, el cumple de Laura. Y se encaprichó en ponerse una visera de lo más sencilla....
-Ana, después de 2 meses con maleta o mochila, cogió el vuelo de vuelta a casa. Eso sí, montó en el avión muy bien acompañada por Mike. Un amigo de Taiwán.
Estos fueron nuestros 2 últimos rincones de Malasia.... y aunque nos quedan una infinidad por descubrir, Malasia ha causado una sensación muy muy agradable en maleta o mochila; rico en cultura, en lenguas, en gastronomía, en amabilidad, en belleza...
...a ver qué opinión os merece a vosotras y vosotros.